18/07/2022

La ciudad de Bella Vista honró a su patrona la Virgen del Carmen bajo el lema “Acompáñanos en este tiempo sinodal de Comunión, Participación y Misión”, con una programación que se circunscribió de manera expresa a una caravana y cabalgata de la fé con posterior Misa Concelebrada en el templo parroquial a raíz de las bajas temperaturas y lloviznas que marcaron la jornada de este 16 de julio.

Durante la ceremonia central a la que asistieron entre otras autoridades, la intendente Noelia Bazzi, el diputado provincial Walter Chavez, la diputada nacional Nancy Sand y una nómina de concejales municipales; presidió la misma el Vicario episcopal Julio Vallejos acompañado por los sacerdotes Ariel Acuña, Héctor Amarilla, Lucas Alderette y el titular parroquial, Gregorio “Goyo” Valenzuela.

Durante la homilía el Vicario hizo alusión a los hechos que impidieron las celebraciones y festividades religiosas a nivel de multitud y dijo “La pandemia nos hizo de alguna manera más individualistas, por no decir egoístas” y más adelante al referirse a las vigentes actitudes humanas interrogó “Cuál será la medida de nuestra calidad? Lo que ya no nos sirve? Lo que nos sobra?

Pero la  sinodalidad de nuestro Santo Padre nos invita a recuperar nuestra condición de hermanos al servicio de nuestros hermanos”, reflexionó.

Más adelante al tomar la palabra el párroco anfitrión expresó un agradecimiento “a mis hermanos los sacerdotes que vinieron a celebrar.  A la señora intendente. A los niños del Jardín Pimpollitos que nos acompañan. A los cadetes del cuerpo de Policía. Bomberos Voluntarios. Hospital local. Al ministerio de música nuestra”, indicó para cerrar diciendo “Dios quiera que sigamos con alegría honrando a nuestra Madre”.

Finalmente y antes de la Bendición Comunitaria, se escuchó un audio mensaje de monseñor Andrés Stanovnik que decía: Me gustó mucho el lema Virgen del Carmen elegido por la comunidad de Bella Vista.

Este tiempo sinodal nos enseña que debemos seguir poniendo lo mejor de uno para el bien de todos. Debemos ser hombres decididos a ser cristianos. Atiendan con amor e inteligencia a los que tienen hambre. No abandonen a los jóvenes que están en la calle.

Trabajemos en la unidad participativa y misionera. Los abrazo y los bendigo en el nombre del padre del hijo y del Espíritu Santo”.