Contexto

En este sentido, se explicó que “el nivel de agua de las napas subterráneas de las cuales se extrae agua potable, depende directamente del ciclo de lluvia. Debido a que estamos atravesando el tercer año consecutivo de extrema sequía, causada por el fenómeno meteorológico “El Niño”, en toda la provincia se registra un déficit en el promedio anual de lluvias que puntualmente en Curuzú Cuatiá marca un faltante de 600 mm hasta la fecha, siendo una de las localidades más afectadas del territorio provincial.

Plan de contingencia

En base al plan de contingencia elaborado ante esta situación, “se programaron tareas de relevamiento, reparación y mantenimiento de redes, ejecución de perforaciones en lugares estratégicos para la extracción de agua potable. Se procedió al cierre de mallas y nexos para mejorar la eficiencia en el sistema de redes y se dispuso el envío de un camión cisterna del Gobierno Provincial para actuar como soporte durante la ejecución de estos trabajos”.

Desde noviembre de 2022 a enero 2023 se realizaron 14 perforaciones de las cuales 7 se encuentran activas.

Por otra parte se hace un permanente control de presión en toda la localidad que presentaron niveles estables en su mayor parte, aunque se detectó una zona crítica, ubicada en el centro de la ciudad, en las calles Pueyrredón al 864 y Berón de Astrada al 1094, encarándose soluciones al inconveniente.

Asimismo se continúa con la exploración en distintos puntos de la ciudad para localizar nuevas fuentes de abastecimiento de agua, se trabaja en la ampliación de la red de agua potable en el Barrio Porteño, Avenida María Duarte de Perón y calle Chiclana y se emprende la detección de conexiones domiciliarias en mal estado que dificultan el ingreso del agua a las viviendas.

Cabe destacar, que desde el MOSP, asimismo, se viene monitoreando las diferentes acciones y situaciones, al tiempo de trabajar arduamente para asistir a Curuzú Cuatiá en esta delicada situación, producto de la intensa sequía que lleva años en nuestra zona.