
Con la reintroducción del yaguareté al Iberá, evidencian impacto positivo en ese ecosistema
Desde la Fundación Rewilding Argentina que lleva adelante en Corrientes, el proyecto de reintroducción del yaguareté en el Iberá, con el apoyo del Gobierno provincial, entre otros, explicaron los efectos del regreso de dicha especie al hoy Parque Nacional. De esta manera, con 18 yaguaretés viviendo libres en el Iberá, señalaron que algunos de los impactos esperados comienzan a evidenciarse positivamente, en lo que respecta a la recuperación de procesos ecológicos de este ecosistema.

10/10/2023
Con la desaparición de una especie clave, como lo es el
yaguareté, se pierden también sus interacciones ecológicas, afectando la
estructura y función de los ecosistemas donde habitaba. En este marco, la
reintroducción de la especie mencionada tiene como uno de sus grandes objetivos
recuperar relaciones ecológicas en las que este depredador participaba.
La teoría ecológica predice que el regreso del yaguareté
podría generar efectos en cascada sobre los eslabones más bajos de la cadena
trófica y regular procesos como la herbivoría y la competencia. Así, el Iberá
podría resultar en un ecosistema más diverso, más resiliente y con mayor
capacidad de secuestrar carbono y colaborar con la mitigación del cambio
climático.
Sin embargo, estas predicciones están siendo puestas a prueba
utilizando técnicas científicas. Por eso, diversos institutos del Consejo
Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Proyecto
Yaguareté y Rewilding Argentina, con el apoyo de National Geographic Society,
aunaron esfuerzos para hacer frente a tareas de evaluación y monitoreo de “una
manera sólida y confiable acerca de los efectos del yaguareté sobre el
ecosistema, lo cual es una tarea fundamental pero sumamente compleja”,
manifestaron.
Explicaron así, que con 18 yaguaretés viviendo libres en el
Iberá, “algunos de los impactos esperados comienzan a evidenciarse, ya que
monitoreos científicamente robustos permiten documentar los efectos sobre el
ecosistema que resultan del regreso de su depredador tope”.
Para el investigador del CONICET e integrante del Centro de
Investigaciones del Bosque Atlántico (CEIBA), que trabaja en el Proyecto
Yaguareté, la reintroducción de esta especie que se está desarrollando en el
Iberá, “es realmente un hito para la conservación del yaguareté a nivel mundial”.
Agregó además que “tenemos esa satisfacción de que venga saliendo todo tan
bien, y esperanzados en que se pueda seguir multiplicando esta población y tal
vez replicando la experiencia en otros lugares”.
Por su parte, también del CONICET-CEIBA, el investigador
Carlos De Angelo, expuso que el proyecto “implica una experiencia muy única en
entender cuál es el rol que el yaguareté tiene en este ecosistema. Por ejemplo,
los carpinchos forrajean en los pastos del Iberá, pero ahora que ya está el
yaguareté, posiblemente cambiaron su comportamiento y ya no forrajean de la
misma forma”.
Entonces, “cuál es esa cascada de impactos que puede tener el
yaguareté para volver a hacer funcionar mecanismos en el Iberá que existían
antes de que se extinguiera y que hoy en día se están recuperando a partir de
la reintroducción”, detalló el especialista. Dijo además que, desde los
orígenes del proyecto, “estuvimos colaborando con Rewilding Argentina y con
otros grupos de investigación del CONICET, para justamente hacernos estas
preguntas y poder estar preparados, monitoreando antes y después de la
reintroducción entre los distintos equipos, las distintas piezas de este
rompecabezas que tiene que ver con recuperar procesos ecológicos en un
ecosistema”.